El primitivo nombre es “El Mejano”, que significa mojón, montón de piedras.

Posteriormente y por derivación toma el nombre de ALMAJANO, de origen árabe.
A  mediados del S.XV, tuvo lugar el episodio histórico de la firma de “La Tregua de Almajano”. Dicha tregua fué acordada entre el Rey de Castilla Juan II y los emisarios del Rey de Aragón, Alfonso V “El Magnánimo”, que pretendía conquistar territorio castellano y fué parado en el Moncayo. La tregua de paz se firmó en “El Real de Almajano”, edificio blasonado, cerrado por recinto amurallado con almenas y portón de sillería y galería elevada del S.XVI, con arcos de medio punto sobre fustes cilíndricos y capiteles dóricos. En la fachada se observa el escudo de armas. Está situado en la Plaza Constitución.

También son dignas de visitar sus casas de origen mesteño, blasonadas, adinteladas de sillar que datan del S.XVIII.